Este nuevo material es más fácil de transformar que el PLA en los procesos de inyección y de extrusión. Además, es 4 veces más rígido y permite un ahorro de energía de hasta un 40%.

Este nuevo material tiene un aspecto similar al del poliestireno, y se plantea como una alternativa más sostenible para la fabricación de objetos de plástico de un solo uso como vasos para café, bandejas, pajitas y cubiertos.