Esto se consigue mediante una tinta, utilizando nanotecnología, que detecta si un envase ha sido abierto. Se produce un cambio en el color de la tinta que pasa de ser incolora a tener un color azul cuando detecta la presencia de oxígeno. Esta tinta se puede utilizar en etiquetas para envases de alimentos como leche, carne o café entre otros.

La tinta se podría utilizar también para indicar si un envase con atmósfera modificada ha sido manipulado y ha cambiado la atmósfera en el interior del envase.